Cerca de 800 mil víctimas del conflicto han sido indemnizadas hasta el momento por la Unidad para las Víctimas

En la audiencia de rendición de cuentas, presentada por la entidad, se evidencian avances significativos en la implementación de medidas de reparación colectiva y una reducción en la entrega de recursos necesarios para atender emergencias humanitarias gracias a la firma del acuerdo de paz.

Con una inversión superior a los 5 billones de pesos, el Gobierno nacional, a través de la Unidad para las Víctimas, ha indemnizado administrativamente, desde su creación en 2011, a cerca de 800 mil sobrevivientes del conflicto, el mayor número en el mundo por este concepto.

Así lo informó la entidad en su audiencia pública de rendición de cuentas, en la que se presentó un balance de la labor realizada por sus áreas misionales, en materia de reparación, gestión humanitaria, gestión interinstitucional, asuntos étnicos y registro y gestión de la información. La audiencia contó con la presencia de los miembros de la Mesa Nacional de Participación Efectiva de las Víctimas y Nemesio Roys Garzón, Director del Departamento para la Prosperidad Social.

De acuerdo con las cifras de la Unidad, en 2017 fueron otorgadas 115.626 indemnizaciones administrativas, con lo cual, el número de víctimas que han sido beneficiarias de esta medida de reparación durante el Gobierno del Presidente Juan Manuel Santos asciende a 791.801 personas.

“En 2017, la Unidad para las Víctimas alcanzó una ejecución del 97% de su presupuesto, que fue de 1 billón 806 mil millones de pesos. De esta suma, el 95% fue destinado a gastos de inversión y al Fondo de Reparación, de donde salen los recursos para el pago de las indemnizaciones a las víctimas. Solo el 5% restante se destinó a gastos de funcionamiento”, manifestó la Directora de la Unidad para las Víctimas, Yolanda Pinto Afanador.

Teniendo en cuenta las limitaciones presupuestales, la Unidad para las Víctimas ha establecido criterios para priorizar la entrega de las indemnizaciones a personas mayores, población con discapacidad y enfermedades catastróficas y a víctimas de violencia sexual. Así mismo, se tiene especial atención por los procesos de reparación étnica y la superación de la situación de vulnerabilidad.

Del total de personas indemnizadas, 277.627 han recibido orientación para una inversión adecuada de sus recursos, que les permite adquirir nociones básicas para hacer una mejor administración del dinero que reciben, y 17.191 fueron atendidas en estrategias de recuperación emocional.

En 2017, la Unidad para las Víctimas alcanzó avances significativos en materia de reparación colectiva. Teniendo en cuenta evaluaciones hechas anteriormente, se fortaleció esta estrategia, lo que permitió que en 2017 se diera un crecimiento del 137% en el número de acciones implementadas en Planes Integrales de Reparación Colectiva aprobados por organizaciones y comunidades.

El año pasado, se reconoció la condición de sujetos de reparación colectiva a 203 comunidades campesinas, 373 sujetos étnicos y 41 organizaciones, movimientos y grupos. 127 planes han sido aprobados en las instancias competentes y frente a 60 de ellos se instaló la consulta previa, de acuerdo con la normatividad existente en relación con grupos étnicos.

Dos sujetos de reparación colectiva lograron alcanzar ya el cien por ciento de las acciones de sus planes de reparación colectiva implementadas: la comunidad de Pita, en el corregimiento de Las Tablas, municipio de Repelón (Atlántico) y el Corregimiento de Santa Isabel, municipio de Curumaní (Cesar).

En materia de atención y ayuda humanitaria, la Unidad para las Víctimas invirtió en 2017, 783 mil millones de pesos para atención de víctimas de desplazamiento y 3.699 millones de pesos en la entrega de atención humanitaria a víctimas de otros hechos victimizantes.

Desde 2012, se han invertido 4.3 billones de pesos en asistencia humanitaria a víctimas, pero lo más significativo en 2017 fue que, gracias a la firma del acuerdo de paz, se registró una disminución del 87% en el recurso anual requerido para atender emergencias humanitarias, si se compara este año con el 2012.

Parte de la labor de la Unidad es apoyar a las víctimas para que se fortalezcan como ciudadanos autónomos, con participación, incidencia y corresponsabilidad en la política pública que les concierne.

En este sentido, las víctimas están hoy en día presenten en 1.057 mesas de participación elegidas de manera democrática a nivel municipal, departamental, nacional y en el exterior. A través de estos espacios tienen la oportunidad de incidir en la política pública de víctimas en todos los niveles del Estado.

Uno de los ejemplos más importantes de esta incidencia fue la que hicieron los miembros de la Mesa Nacional de Víctimas en la expedición de los actos legislativos y las leyes a través de las cuales se reglamentó el acuerdo de paz y en la presentación de un proyecto de ley consensuado, que busca la creación de 16 curules para víctimas del conflicto en la Cámara de Representantes, tal como lo estableció el acuerdo de paz.

La Unidad para las Víctimas participa decididamente en la implementación del acuerdo de paz porque considera, como lo ha manifestado el Presidente Santos, que el cese de la confrontación armada es la mejor forma de reparación.

Vea el informe completo de rendición de cuentas presentado por la Unidad para las Víctimas.