En ‘La Tramacúa’ deberán permitir ingreso de hoja de coca a un interno

Por orden de la Corte Constitucional, la Cárcel de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar, mejor conocida como ‘La Tramacúa’, donde permanecen presos varios de los delincuentes mas peligrosos del país, deberá permitir el ingreso de hojas de coca para un interno de origen indígena.
Dicho recluso es Alejandro Copete Robles, nativo arhuaco, que interpuso una tutela ante la entidad para que pueda recibir ayú (nombre de la hoja de coca en arhuaco) y poporo, así como otros materiales artesanales usados por su comunidad, exigiendo que se garantizaran sus derechos a la diversidad, la igualdad y la identidad cultural.
Según el indígena, el director del penal le había negado su petición argumentando que al interior del centro penitenciario no hay el espacio suficiente para dichas actividades arhuacas y que, además, podía usarse como narcótico.
No obstante, en su pronunciamiento, la Corte Constitucional indicó que prima el respeto por las tradiciones y principios de las comunidades indígenas, las cuales deben ser protegidas sin reparo, mas aun cuando está escrito en la constitución.
“En consecuencia, es deber del Estado reconocer con igualdad y dignidad a todas las culturas que conviven en el país. No se puede colocar en el mismo plano la planta coca y los usos lícitos y legítimos que de ella se han hecho y se pueden hacer, y la utilización de la misma, como materia prima para la producción de cocaína”, sentenció la entidad judicial.
Puntualizó que tan como se ha señalado por muchos expertos, el ancestral consumo de coca en nuestras comunidades indígenas no tiene efectos negativos.
Las directivas de la cárcel tienen 15 días para autorizar y regular el uso de la hoja de coca dentro de sus instalaciones.