Valledupar vivió con responsabilidad el proceso de lucha para impedir que los contagios por Covid-19 se desbordaran, manteniendo siempre el control sanitario y una reducida tasa de letalidad que incluso estuvo por debajo de la media nacional.
La ciudad afrontó en el trimestre agosto, septiembre y octubre la situación más crítica, llegando a registrar más de 500 casos en un día, lo que encendió las alarmas y se hizo necesaria la presencia del Ministro de Salud, Fernando Ruiz, para darle vida a la estrategia Prass y rastrear casos barrio a barrio para evitar un pico súbito de contagios.
Entonces se incrementaron los toques de queda, ley seca y se mantuvo el pico y cédula, incluso cuando el país se disponía a abrir el comercio, y la situación nacional era distinta dado el comportamiento del virus, tan distinto en cada ciudad.
En definitiva, estas acciones responsables conllevaron a mantener dominado el virus y evitar su expansión, no solo en el casco urbano, también en los corregimientos.
Esa responsabilidad que se vislumbró a lo largo de la pandemia, se aprecia en la preparación frente al proceso de vacunación, donde el alcalde Mello Castro aseguró con todo el énfasis posible que “Valledupar está listo para este proceso”.
Inicia la ciudad con 1.050 vacunas, pero también con la sensación de que la situación está organizada y controlada por la institucionalidad, dados los pasos que se han dado en materia logística y de preparación entre el gobierno nacional, departamental y local, pero también con la fuerza pública, EPS, IPS, hospitales y demás actores.
“Le entregamos a las EPS el censo de todos los trabajadores de la salud de Valledupar, con ello le ganamos tiempo al tiempo y se actuará más rápido a la hora de vacunarlos”, agregó Castro ante los medios de comunicación que se dieron cita en el Palacio Municipal.
El primer lote de vacunas llegará entre jueves y viernes para principalmente iniciar con los trabajadores de la salud que tienen como radio de acción las unidades de cuidados intensivos, mientras hacen cola el resto de los empleados de este sector y los adultos mayores de 80 años, cuyo censo también está listo.
Este es el reto más grande de los últimos años no solo en Valledupar también en el país, para lo cual todas las administraciones deben trabajar unidas y de manera articulada para llegar al objetivo final de lograr vacunar de manera efectiva a toda la población.