Y el control Legislativo ?
Por: José Luis Blanco Calderón
Esp. Derechos Humanos
Master Derecho
En todos los Estados Constitucionalistas existe la figura de los estados de Excepción, como una prerrogativa de los jefes de Gobierno para enfrentar situaciones anormales o crisis en el ámbito social, económico o ambiental. Resulta ser una herramienta útil para abordar situaciones como la que atraviesa el mundo tras la repentina pandemia del coronavirus, no obstante en la formalidad de la ley al otorgar esta potestad al jefe de gobierno se pueden lesionar algunos preceptos constitucionales por el no cumplimiento de las disposiciones de dicha Carta Magna , recordemos que la distribución equilibrada del poder dentro de un Estado acentúa los principios democráticos tutelados.
Analicemos entonces qué tipo de omisión ha podido suscitar en desarrollo de esta figura excepcional del estado de emergencia.
El Art 174 de la Constitución Política de Colombia señala la potestad que tiene el Presidente del Congreso para convocar a sesiones presenciales en la ciudad de Bogota, o en otro lugar que se designe acordado por ambas Cámaras de igual forma la sesión del poder legislativo es fundamental para ejercer el control político del jefe de gobierno, así las cosas no consideró válido la negativa reiterada para llevar a cabo sesiones presenciales al menos en porcentaje considerable del legislativo, algunos parlamentarios han manifestado que no existe norma que reglamente la sesión virtual evidentemente esta es una omisión al cumplimiento del deber legal. Son definitivamente excusas inapropiadas, sabiendo que Colombia es uno de los pocos Países que prácticamente cerro su legislativo, países como Estados Unidos, Ecuador y muchos mas en America y el mundo continuaron con la fundamental actividad legislativa en estos tiempos de Emergencia, demostrando asi que el poder legislativo es independiente del ejecutivo y que no esta a merced de las decisiones Presidenciales para ejercer dicha obligación Constitucional como es la de sesión ordinaria.
Tan necesario y pertinentes es la declaratoria de un estado de excepción , así mismo que se incrementen los controles políticos y judiciales a las decisiones del ejecutivo para hacer frente a la situación de crisis, esos denominados controles políticos son producto de la teoría de separación de poderes, los cuales garantizan que la balanza del poder dentro de un Estado no se incline dimensionalmente hacia uno u otro, en este caso puntual hacia el Poder Ejecutivo, ocasionando las denominadas dictaduras o excesivas concentraciones de poder que limitan las libertades de los administrados.
Podríamos decir que el país se encontró en un estado de cosas inconstitucionales en medio del segundo periodo constitucional del legislativo ( 16 de marzo – 20 de junio) por la omisión al control político hacia el ejecutivo; no obstante las reuniones virtuales convocadas por el presidente del Senado entre críticas y desacuerdos dieron terminación al periodo el cual
pasará a la historia como el más tímido en cuanto a control se refiere frente a las innumerables iniciativas que presento el gobierno Nacional.
Sabemos lo complejo que supone la re invención frente a las adversidades en tiempos de coronavirus, y mas para esta Corporación cuyos integrantes en su gran mayoría ya se encuentran en sus regiones fuera de Bogota, la edad de muchos Congresistas mayores de 70 años y algunos con enfermedades de base hacen que la situación sea mucho más compleja para ejercer su obligación Constitucional ; ad portas de iniciar el siguiente periodo Legislativo esperamos contar con un Congreso mucho más pro activo a la hora de ejercer un control político serio y coherente frente a la situación de emergencia sanitaria, mas bien aprovecho y les manifiesto a las personas del común que ejerzan su derecho a libre expresión que al parecer está resultando mucho más efectivo a la hora de denunciar los malos manejos que algunos gobernantes en diferentes países y ciudades están dando a la Pandemia del Coronavirus y demás temas de agenda publica gubernamental, al parecer el efecto que generan las redes sociales y denuncias publicas en las sociedades es mas efectivo que una sesión virtual de nuestros Honorables Congresistas.
